Lic. Elisa Canelo

Impacto del aislamiento en la salud mental de los adolescentes

 Es importante poder contextuar este fenómeno tan singular que se evidencia en la población adolescente. Para ello es preciso considerar que el aislamiento se experimenta como un fuerte quiebre en las rutinas habituales de toda la dinámica familiar. Se vivencia inconscientemente un duelo por los proyectos individuales desconociendo el momento de concreción de los mismos.

 La discontinuidad de la educación presencial, la participación en eventos sociales y la realización de actividades deportivas supone también la suspensión de lazos físicos, dimensión que es protagonista en esa etapa evolutiva. Parte de la seguridad y del sentimiento de pertenencia radica en mostrarse, moverse en grupo, tocarse, experimentar.

 Si bien la educación virtual es considerada un plan de contingencia frente al distanciamiento social impuesto por la cuarentena, el alumno se enfrenta al desafío psicológico de tener que adaptarse a una nueva modalidad de cursada, con todos los cambios que esto le representa.

 La sensación de pérdida, incertidumbre y muerte se instala en el imaginario social de toda la población, y en el caso de los adolescentes se suma a los duelos habituales que deben atravesar, propios de la etapa del ciclo vital que experimentan (cambio en sus relaciones sociales, cuerpo de la infancia, etc.). Por otra parte, los padres o adultos responsables no siempre pueden acompañar este proceso de forma adecuada, ellos mismos se encuentran abocados a vivenciar estos cambios de la mejor manera, en muchos casos el cumplir con el home office impide contar con el tiempo necesario para estar disponibles y ayudar en las tareas de sus hijos, lo cual pone de manifiesto que no necesariamente compartir más horas en el hogar favorece la comunicación en este vínculo.

 Cabe señalar que los adolescentes padecen particularmente el “encierro” planteado por la cuarentena poniendo en juego su ansiada independencia – tarea vital de esa etapa de su vida- al no poder recurrir a su grupo de pertenencia. Esto desencadena, en muchos casos, fuertes enfrentamientos con los padres, malestar e indicadores de ansiedad.

 A partir del prolongado aislamiento se han observado la aparición de sintomatología que abarca desde abruptos cambios en el humor hasta presencia de ideación suicida. Esta población pertenece a un grupo etario que se ve afectado especialmente por el método de afrontamiento de la pandemia, por lo que les debemos prestar especial atención en los momentos actuales.

Lic. Elisa Canelo

Especialista en Psicoanálisis de niños y adolescentes